Análisis predictivo de comportamiento, simulación de escenarios, automatización de tareas, optimización de recursos, alertas de capacidad y necesidades futuras son apenas algunas de las funcionalidades que a ésta altura cualquier administrador de nube debe tener en sus manos.
La implementación de nubes privadas y públicas no sólo generó que las compañías tengan sus aplicaciones de negocios ejecutando de manera más rápida y eficiente sino que también provocó un cambio profundo en la manera de gestionar esas nuevas plataformas.