El almacenamiento de bloques es un tipo de almacenamiento de datos que se suele utilizar en los ambientes de red de almacenamiento SAN, donde los datos se almacenan en unidades conocidas como bloques.
Cada bloque actúa como un disco duro individual, y el administrador de almacenamiento lo configura. El sistema operativo basado en el servidor controla estos bloques, y se suele acceder a ellos a través de Fibre Channel (FC), Fibre Channel mediante Ethernet (FCoE), protocolos iSCSI y otros.
¿Dónde se utiliza el almacenamiento de bloques?
El almacenamiento de bloques es la interfaz de almacenamiento nativo típica de la mayoría de los medios de almacenamiento a nivel del driver. Un driver de disco duro, por ejemplo, escribe y lee en bloques a través de su dirección de bloque en el disco formateado.
Muchas aplicaciones también utilizan el almacenamiento de bloques para sus operaciones de I/O persistentes. Un ejemplo notable son la mayoría de las aplicaciones de RDBMS, como Oracle, DB2, etc. Las aplicaciones que utilizan otros medios de almacenamiento, como sistemas de archivos, delegan las operaciones de I/O de almacenamiento de bloques nativo al sistema de archivos subyacente que sirve de mediador entre la interfaz de almacenamiento de bloques subyacente y las operaciones de I/O de archivos emitidas por la aplicación (por ejemplo, HDFS, NFS, etc.).
Las redes de almacenamiento SAN siempre exponen la interfaz de almacenamiento de bloques a las aplicaciones del cliente.
En muchos casos, según el soporte de hardware, el tamaño del bloque se puede configurar, así como varios parámetros, por ejemplo, la ubicación del bloque en el medio real. La aplicación del cliente tiene la función de mapear entre sus propios formatos de almacenamiento y el sistema de almacenamiento de bloques subyacente.