En los últimos meses de la administración del presidente Obama, se ha dedicado a sentar las bases de un plan permanente para apuntalar la infraestructura digital de la nación, la cual considera “crítica”.
La casa Blanca describió la era digital como una especie de arma de doble filo. Según el informe dado a conocer al presidente Barack Obama, “a la vez que se tiene una oportunidad de increíble riqueza tecnológica; también se enfrenta un conjunto de desafíos de seguridad, muy complejos y cambiantes que surgen de un ambiente donde cada vez se descarga más sobre nuestras vidas y se almacenan datos que son, probablemente, mucho más vulnerables “.
El Plan de Acción Nacional de Ciberseguridad de Obama, llamó a la formación de una comisión bipartita para desarrollar un marco duradero pero adaptable a cómo las agencias federales deben mejorar su propia situación de seguridad, y trabajar con los miembros de la comunidad empresarial, los gobiernos estatales y locales para establecer un sistema mejor coordinado para la defensa contra las amenazas informáticas.
En ese espíritu de cooperación pública-privada, Obama ha aprovechado la presencia de su ex asesor de Seguridad Nacional, Tom Donilon, quien presidirá la comisión. Junto a él está también el ex CEO de IBM, Sam Palmisano, quien será el vicepresidente.
“Con un presidente que entienda los asuntos del gobierno y de la seguridad nacional; un vicepresidente del sector privado involucrado con las intimidades de la informática y el mundo digital, además de los aspectos económicos inherentes al tema, creo que tenemos a las personas más indicadas y preparada para dirigir este esfuerzo”, dijo Obama.
Obama estableció la ciberseguridad, junto con numerosos otros problemas de TI, como una alta prioridad al principio de su administración, y ha citado en sus discursos “el enorme progreso” que los departamentos y agencias han hecho en ese frente, pero parecía caracterizar esos esfuerzos como incrementales; tratando de mejorar ciertos sistemas, tratando de reformular ciertas vulnerabilidades sobre seguridad.”
Con la nueva comisión de seguridad cibernética, la Casa Blanca está ampliando su red en la lucha contra lo que Obama dice que “va a ser un gran agenda a largo plazo, y que es muy complicado, muy técnica, y nos va a requerir para revisar un montón de sistemas heredados que ya están en marcha“.
La ciberseguridad ocupa un lugar destacado en la última solicitud de presupuesto del presidente. De los casi $ 90 mil millones solicitados, Obama le gustaría gastar en los sistemas informáticos del gobierno, unos $ 19 de millones, que se canalizarían a diversos programas de seguridad, incluyendo un fondo para modernizar los sistemas y esfuerzos para capacitar y contratar a más expertos en el área de la seguridad informática.
La nueva comisión tiene la tarea de producir un informe para el 1 de diciembre, que se dirigirá a la totalidad de esos desafíos, pero también hará un enfoque a largo plazo. En particular, Obama señala que la comisión será responsable de desarrollar estrategias para apuntalar las bases de datos federales masivas que albergan los datos sensibles de ciudadanos de EE.UU., idear estrategias de educación para mantener al público informado sobre las últimas amenazas y métodos para proteger su información personal, y establecer un marco para el gobierno para coordinar con el sector privado. CIOAL The Standard IT