Los servicios móviles comenzaron el proceso de proliferación de redes 4G en América Latina, al punto de contar con la tecnología presente con al menos una red en cada uno de los mercados. Incluso 2015 es el año donde LTE comenzará a tener un modelo de negocios que le posibilite el crecimiento a mayor escala, incorporando nuevos sectores a la oferta dentro de los mercados con mayor experiencia en la comercialización del servicio.
Cabe destacar que el desembarco de la tecnología en la región se produce de manera simultánea, y en algunos mercados antes, de los mercados desarrollados. En este escenario, es importante considerar que el desarrollo de 4G no seguirá los pasos acelerados de 3G, ya que producto de estar siendo desarrollado al unísono con Europa y Estados Unidos, los operadores cuentan con menores escalas, lo que hace más costoso su despliegue. De todas maneras, la tecnología ya cuenta con punto de partida en América Latina y su despliegue mostrará un paso firme.
Sin embargo, a escala global la industria ya comenzó las discusiones necesarias para establecer el roadmap hacia 5G. Entre los fabricantes más activos sobre el tema se encuentran Ericsson, Huawei y ZTE, quienes ya realizaron distintas pruebas de laboratorio para observar el comportamiento de la tecnología. A su vez, organismos como el regulador británico Ofcom realizaron las primeras consultas públicas. En este escenario, el sector espera tener las primeras redes precomerciales para 2018 y, con previsiones más equilibradas, para 2020 los primeros esbozos comerciales.
Que es 5G?
La Quinta Generación de servicios móviles o 5G consta de redes que serán fundamentalmente diferentes de sus predecesoras, confiando en frecuencias de espectro más altas, mayor ancho de banda y despliegues de células de mayor densidad. En concreto, los sistemas 5G brindarían 1 Gbps de velocidad de manera uniforme y apoyarán tasas de datos de al menos 10 Gbps y hasta 50 Gbps para usuarios de baja movilidad.
En términos de servicios, el objetivo de 5G estaría orientado a potenciar el concepto de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés). La mayor velocidad y menor latencia del servicio está apuntada a mejorar las conexiones móviles de una mayor cantidad de dispositivos conectados e interactuando entre ellos por diferentes tipos de aplicaciones. De esta manera se buscan mayores soluciones destinadas a automatizar el trabajo entre dispositivos facilitando la vida del usuario.
Si bien por el momento está en discusión qué tipo de frecuencias de espectro alojaran los servicios 5G, la industria está haciendo especial hincapié en las bandas ultra altas. En esa línea se encuentran empresas como Google, Samsung y Qualcomm.
A Velocidad China
La expectativa más rápida de despliegue de servicios 5G fue anunciada por Huawei y el operador ruso MegaFon. Imitando el modelo brasileño de LTE para 4G, ambos firmaron un memorando de entendimiento para desarrollar la tecnología 5G, con planes de despliegue de redes de prueba para brindar cobertura al Mundial 2018, que se desarrollará en Rusia. El acuerdo los compromete a compartir los avances en la estandarización de la tecnología y a trabajar en conjunto para determinar los requerimientos de la construcción de la red 5G.
Por su parte, ZTE propone redes pre 5G, es decir el concepto de una tecnología que estaría disponible mucho antes y que entrega experiencia de uso comparable al 5G, ofreciendo alto tráfico de datos y baja latencia. La idea es poder aplicar esas soluciones adaptables a patrones de nueva generación de redes móviles. En ese sentido prepara antenas MIMO, que ZTE alega que puede utilizar sin modificar la interface aérea de 4G.
De todas maneras, y con un horizonte más realista, Huawei prevé 5G comercial en amplia escala para 2023. El fabricante realizó inversiones de US$ 600 millones destinadas a la investigación y el desarrollo de lo que será la nueva generación, donde proyecta que las primeras redes pre comerciales estarán en operación recién en 2020, apenas dos años después de la previsión para el establecimiento del estándar.
Tiempo de entrada
Entre los operadores, la clave para el desarrollo de la tecnología la dio AT&T, quien remarcó que el principal punto a tener en cuenta es el “time to market”. De acuerdo con John Donovan, SVP de Tecnología y Operaciones de Redes de AT&T, la parte más difícil de 5G será saber cuándo lanzarlo al mercado. Y aventuró que para 5G falta una década, con lanzamientos hacia 2025.
Entre los que realizaron pruebas, se destaca el operador móvil japonés NTT Docomo que llevó adelante pruebas experimentales 5G con Alcatel-Lucent, Ericsson, Fujitsu, NEC, Nokia y Samsung. Los ensayos se centraron en bandas superiores a los 6 GHz. El operador espera desplegar 5G comercialmente en 2020, con velocidades pico de 10 Gbps.
Acuerdos para el desarrollo de 5G
Distintos estados desplegaron sus primeros acuerdos, que tenían como finalidad alcanzar una estrategia uniformada a escala global. En ese sentido, Corea del Sur y la Unión Europea firmaron un acuerdo para cooperar en el desarrollo de tecnologías de redes 5G. Ambas partes trabajarán en conjunto para fortalecer su colaboración en TIC, con especial enfoque en el desarrollo de tecnologías, normas y políticas para 5G.
De todas formas, no fue la única acción de Corea del Sur en ese sentido. El gobierno de ese país invertirá US$ 1.500 millones para el desarrollo e investigación para tecnologías móviles 5G. El Ministerio de Ciencia, TIC y Planeamiento estima comenzar las pruebas para 2017 y espera servicios comerciales para 2020. Por su parte, la Comisión Europea y la Asociación PPP 5G firmaron un contrato para crear una asociación público -privada 5G (PPP). El 5G PPP seguirá desarrollando la tecnología en pos de prepararse para la futura normalización del sistema y de los componentes que se espera sean desplegados en la próxima década.
Entre los primeros reguladores en dar un paso hacia la evolución de la tecnología se destaca Ofcom. El regulador británico abrió una consulta pública para establecer el destino de parte del espectro de frecuencias para 5G. La agencia británica convocó a la industria a ayudar a asentar las fundaciones para la próxima generación de comunicación móvil en el Reino Unido. El regulador prevé el uso de frecuencias por arriba de los 6 GHz para soportar las altas demandas de usuarios en áreas de gran concentración de población, con velocidades de entre 10 Gbps y 50 Gbps.
En pleno despliegue de los servicios 4G LTE, los distintos actores de la industria ya están pensando en una nueva generación de servicios móviles. Si bien a los ojos del usuario puede parecer una aventura prematura, lo cierto es que pensar el mediano y largo plazo las alternativas de evolución y mejoras de servicios es una práctica habitual del sector. En ese marco, y con el horizonte puesto en conceptos como IoT la llegada de la nueva generación móvil no parece estar tan lejos.