Alertan sobre el peligro de un aumento de la ciberdelincuencia en la región en caso de no tipificar los delitos informáticos y no armonizar las legislaciones penales regionales América Latina, y en especial Centroamérica, pueden convertirse en un ‘paraíso’ para los ciberdelincuentes, en caso de no tipificar los delitos informáticos y no armonizar las legislaciones penales regionales, alertó hoy en Panamá una experta.
‘No es lo mismo una estafa económica que una ciberestafa. En la primera se engaña a una persona y, en la segunda, a una máquina. Si eso no lo recoge la ley, el criminal puede salir impune’, dijo la experta en ciberseguridad de la Conferencia de Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos (COMJIB), Mar Carrasco.
‘La ciberdelincuencia va ligada al desarrollo de internet. En el momento en que Latinoamérica se ha convertido en una zona con mayor acceso a internet, la ciberdelincuencia se ha duplicado’, explicó Carrasco.
Si no recogemos todos estos delitos en los códigos penales de los países de Centroamérica, apuntó, ‘se corre el riesgo de que la región se convierta en un paraíso para los ciberdelincuentes’.
Costa Rica y República Dominica son los países que llevan la delantera, según esta catedrática española, en materia de legislación cibernética.
Los ciberdelitos que más proliferan en Centroamérica son los fraudes económicos y el hacking aunque, en su opinión, hay que prestar especial atención al phishing, una práctica que consiste en suplantar la personalidad de alguien usando datos personales como contraseñas, usuarios y correos electrónicos.
La armonización de los tipos penales, es decir, que la ciberdelincuencia se castigue del mismo modo en todos los países de Centroamérica, contribuirá a erradicar esta práctica que comienza en un determinado país, pero cuyos resultados o daños se están dando en otros países distintos.
Carrasco reconoció también que es difícil determinar con exactitud el número de ciberdelitos que se cometen porque los afectados no siempre denuncian ni dicen la verdad, lo que provoca que en las estadísticas haya muchas ‘cifras negras’.
‘A un banco no le interesa decir que ha sufrido un hackeo porque pone en cuestión su sistema de seguridad. Hay un gran problema para saber realmente cual es la tasa de criminalidad, pero podemos decir que la ciberdelincuencia es mayor que el tráfico de drogas’, concluyó la experta de la COMJIB.