martes, 14 de julio de 2015

Retos de la disrupción digital en las empresas

En 1997, el empresario Reed Hastings había rentado la película "Apollo 13", pero como en ocasiones ocurre, olvidó entregarla y por retraso le cobraban 40 dólares. No quería decirle a su esposa de la deuda, por lo que se puso a pensar cuáles podrían ser sus alternativas. Así nació la idea de Netflix, según contó el propio empresario a The New York Times en 2006.

Netflix nació a finales del siglo XX como un videoclub con una plataforma en línea, sin embargo, con el transcurso de los años se convirtió en un servicio de streaming, utilizado por millones de personas en el mundo.

Hastings, junto con Marc Randolph (cocreador de Netflix), entendieron temprano el concepto de disrupción digital, el aprovechamiento de las nuevas tecnologías para hacer crecer un negocio que parecía que había encontrado un tope, como lo era la renta de películas.

El reto de las empresas con la disrupción digital es conocer mejor a sus clientes y a partir del input que reciben, tener la capacidad de hacer análisis de esa información y ofrecerles mejores servicios. Esto incluye la capacidad de hacerlos más leales hacia la compañía, y por el contrario, si no hay una estrategia adecuada, tienes la facilidad de perder a tus clientes con mayor facilidad que antes.

Hay competidores que surgen cada año en tu ramo, y que probablemente hoy no visualizas. “En el caso de Netflix, las empresas que rentaban video no percibían a un competidor como este. Con su ingreso, a los consumidores finales les llegan nuevas oportunidades, nuevos servicios, que las empresas ni imaginaban que sería útil”.
¿Dónde se puede aprovechar?

La disrupción digital puede aprovecharse de distintas formas; por ejemplo, las empresas que se dedican a ofrecer servicios tienen mucho más interacción con el usuario final que las de manufactura. “En el ámbito de servicios como bancos, aerolíneas, de telecomunicaciones, tienen un reto de estar en contacto con sus clientes finales.

En el caso de las manufactureras, señala, lo que buscan es eficiencia, tener capacidad de análisis de información histórica. “Pueden explotar el conocimiento que la compañía ha venido ganando durante años de su operación y del comportamiento de sus clientes”.

Las empresas de manufactura tal vez no están impactadas por el uso de redes sociales, pero no quiere decir que no deben hacerlo con mayor eficiencia. A través de plataformas tecnológicas, puedes definir con exactitud los patrones de consumo de los clientes finales, y por el contrario, las empresas que no utilizan estas tecnologías, tienden a operar con menos eficiencia a un mayor costo.

Los datos de una reciente encuesta global, realizada a los asesores de las diversas firmas miembro de KPMG International, arrojan que a la mayoría de las compañías representadas les preocupa el tema de la disrupción digital, pero pocas son las que están debidamente preparadas.

Según la consultora, 36% de las empresas representadas en la encuesta cuenta con una estrategia digital en una o más de sus unidades de negocio, pero solo 8% tiene una estrategia digital que abarque a toda la empresa.

Te recomendamos leer: 10 tecnologías disruptivas que marcarán el futuro.
¿Por dónde empezar?

¿Quieres integrar más el uso de nuevas tecnologías en tu empresa y no sabes por dónde?, la forma más eficiente es acercar al área de ventas y mercadotecnia con la de tecnología.

Es común ver que hay una asociación entre el Chief Marketing Officer con el de Dirección de Sistemas porque mientras más rápido entiendan que esto es una sociedad entre las áreas de negocio y las de tecnologías de información, más rápido se suben las empresas a este tipo de iniciativas, y más rápido obtienen los beneficios.

Muchas empresas ven el área de negocio como un activo de negocio y no como un área de servicio al negocio.

Los Chief Information Officer (CIO) deben hacer posible que sus organizaciones lleven sus ideas de la fase de diseño al mercado rápidamente y ampliar su oferta de nuevos productos y sistemas.

“La posición ventajosa de un CIO abre una ventana a las necesidades tecnológicas y de información de cada parte de la organización (…) Al combinar esta perspectiva con el conocimiento de las tecnologías emergentes en forma de estrategia digital integral, los CIOs pueden crear valor para la empresa”.

Las propuestas sobre las nuevas tecnologías deben llegar también del área de negocios; más que estudios académicos se trata de tener la cultura de actualizarte sobre los temas de tecnología y las áreas de tecnología estar involucradas en los temas de negocio.