El sobrecalentamiento de los Centros de Datos puede causar serios daños como pérdida de los sistemas críticos de manera constante y además incrementar los gastos operativos de las organizaciones tratando de resolver la situación con parches.
Los centros de datos son consumidores voraces de energía, hambrientos por consumir muchos kilowats. El suministro de electricidad en un centro de datos no es algo sencillo; según Gartner, tan sólo un centro de datos consume entre 40 y 100 veces más energía que las oficinas a las cuales da servicio. Toda esta energía que consumen los servidores y switches, es percibida físicamente en forma de calor.
Los equipos de TI son muy sensibles al calor, una inadecuada administración térmica disminuye notablemente el desempeño de los equipos de TI. En promedio los centros de datos en el mundo sufren interrupciones de funcionamiento al menos 13 veces por año, costándole más de 10 millones de dólares a las empresas por pérdida de productividad y ganancias.
La densidad de calor por gabinete o por rack, se ve muchas veces elevada porque los departamentos de TI quieren aprovechar más los espacios; en los próximos cinco años la mayoría de los centros de datos será capaz de reducir el espacio físico al menos un 30%, lo que será una de las varias tendencias emergentes del centro de datos de aquí al 2020, esto hace más importante la correcta segregación del calor y del aire frío.
Antes los centros de datos crecían sin orden, sin estructura y funcionaban bien por su baja densidad de transistores, poca velocidad y bajo consumo eléctrico, claro comparados con lo que en la actualidad tenemos, incluso había equipos encerrados en gabinetes con puertas sólidas y de cristal. Hoy en día, acorde al crecimiento de la tecnología, cada vez se estarán introduciendo más transistores en el procesador por lo que se producirá más poder de cómputo que resultará en producción de más calor.
La temperatura para los centros de datos según los parámetros de ASHRAE (Sociedad Americana de Ingenieros de Climatización, Refrigeración y Aire Acondicionado), se establece en un rango recomendado de temperatura que va de los 18°C hasta los 27°C y un punto de rocío de -9°C a 15°C y 60% humedad relativa.
El aire no es sólo la mezcla de gases, sino que también contiene agua, es lo que se conoce como humedad y es un factor muy importante en los centros de datos que debe ser controlada a la par de la temperatura; ya que a elevada humedad se puede producir corrosión en los equipos, y se ve muy favorecida cuando se elevan la temperatura y la humedad. Estos dos temas son la piedra angular sobre todo en temas de ahorros, sino se utilizan los correctos parámetros, resultarán en grandes pérdidas económicas para la empresa. Panduit es una de las empresas en el mercado que trabaja en el desarrollado de la eficiencia térmica dentro del centro de datos.
“A mayor cantidad de calor se necesita mayor cantidad de aire para poder mantener un determinado gradiente de temperatura entre la entrada y la salida de los servidores, pero si tampoco existe el aire suficiente lo que va a pasar es que los procesadores se recalentaran poniendo en riesgo la disponibilidad de los servicios”, comentó Hugo César Lara Marcial, CDF Engineer de Panduit.
Por esto es importante la distribución y el manejo de flujo de aire dentro del centro de datos, darle la cantidad de aire adecuada a cada gabinete y equipos. Una temperatura de retorno baja en una máquina de enfriamiento reduce su eficiencia y eso se ve reflejado en costo. centro de datos