lunes, 4 de enero de 2016

La Nube ¿Un simple tema de moda?

¿Es realmente la Nube un tema de moda; un tema sólo apto para conocedores del sector tecnológico? O por el contrario ¿es la solución a una inmensa cantidad de problemas para el sector empresarial, entre otros? ¿Hay que pasarse ya a la Nube, o es mejor esperar y analizar “en frío”, pro y contras?

CIO América Latina/Mario Augusto Beroes Ríos

Ruben Belluomo, Gerente Comercial de Infor, es uno de los que se hace estas preguntas; de los que les preocupa que se hable dela Nube, pero no se concrete sobre el tema. Reconoce que es un “tema de moda” en cuanto a tecnología para las organizaciones.

Sin embargo, afirma que no debe pensarse que es exclusivamente un tema para empresas grandes. “Las organizaciones pequeñas y medianas pueden aprovechar todos los beneficios de la nube. De hecho, las PyMEs tienen quizás más para ganar con las implementaciones en la nube, y realmente corren el riesgo de quedarse afuera si no se pasan”.

Asegura, basándose en un estudio de Deloitte, que las PyMEs que utilizan un mayor número de servicios en la nube crecen un 26% más rápido que aquellas que no usan herramientas en la nube, y son aproximadamente un 21% más rentable, en promedio.

“En general, las empresas medianas o quizás pequeñas, trabajan con presupuestos más acotados y menos mano de obra que las grandes empresas. Ahorrar tiempo y dinero es crítico para lograr el éxito. Pasarse a la nube es una garantía de ahorro en tiempo y dinero. No hay que preocuparse por mantener los sistemas, las soluciones o el hardware, sólo hay que seleccionar al proveedor correcto, que se ocupará de todo”.

Bellumo tiene cinco maneras en que la implementación en la nube puede ayudar a las empresas a lograr una mayor agilidad y estar más preparados para el crecimiento:

1. Pagar a medida que se gasta
La implementación en la nube requiere un gasto mínimo inicial en hardware y software. Además, se paga sólo la capacidad que uno usa, lo que elimina la necesidad de cubrir los costos caros de almacenamiento y gestión de datos en servidor propio. Esto significa que se gasta menos en infraestructura tecnológica, de manera tal que se cuenta con más dinero para invertir en el crecimiento de la empresa.

2. Menor Equipo de TI
El equipo de TI no tendrá que pasar el día entero actualizando servidores, reemplazando hardware, gestionando updates del software, y podrá dedicar su tiempo a concentrarse en las tareas críticas que faciliten el crecimiento. En este escenario, el proveedor de la nube será el socio de TI, una extensión de las empresas, que esencialmente aumenta el alcance sin la necesidad de contratar personal adicional ni recursos costosos.

3. Economía en escala
No se puede negar el valor de las economías en escala, y pasarse a una solución basada en la nube no es diferente. Múltiples usuarios pueden acceder a los recursos basados en la nube simultáneamente, de modo que se optimiza la productividad individual y se puede lograr más con menos recursos. Y, gracias a la funcionalidad de auto escalamiento dentro de la nube, se pueden identificar los cambios anticipados en la demanda de los usuarios, para garantizar el hardware y el software requerido en el momento que se lo necesita, ni antes ni después.

4. Movilidad
Los avances tecnológicos que trae el “cloud computing” serán probablemente el mayor impacto en las PyMEs. Para hacer negocios en ambientes basados en la nube, sólo hace falta contar con acceso a Internet. Esté donde esté, en el dispositivo que sea, se puede trabajar. La movilidad permite a los líderes de la organización tomar decisiones críticas en el momento y en tiempo real, basándose en datos en tiempo real. Y la fuerza de trabajo contará con las herramientas que necesitan para colaborar con sus colegas.

5. Facilidad de uso
La belleza de migrar a la nube es su total facilidad de uso. Habrá menos upgrades que gestionar, y no hace falta ocuparse de los inconvenientes con el hardware o software. El proveedor de la nube se ocupará de todo eso, de manera tal que la empresa pueda focalizarse en lo más importante, que es lograr una llegada al mercado más rápida y, en consecuencia, un mayor crecimiento.

“No pueden negarse los beneficios de la flexibilidad, escalabilidad, y agilidad inherentes a las soluciones basadas en la nube, especialmente para empresas pequeñas y medianas. Con las implementaciones en la nube, se paga lo que se usa, puede fácilmente adaptarse para una menor o mayor demanda, se pueden disminuir los gastos en tecnología, lograr una mano de obra más productiva y finalmente mantener un nivel de competitividad mejor que el de la tecnología convencional en servidor propio. Es hora de pasarse a la nube”.