domingo, 8 de marzo de 2015

Mujer-Mamá-Tecnóloga, Olivia Hernández, Directora de Sistemas de Apoyo Económico

Apoyo Económico es una micro financiera dedicada a otorgar préstamos personales y a micro negocios. Dentro de su infraestructura tecnológica, la empresa cuenta con sistemas de almacenamiento EMC y Opensys ha sido su socio de negocios proveyendo la consultoría y el servicio que requiere para mantener su información disponible, actualizada, y con los niveles de seguridad y respaldo que requiere el negocio. 

Con motivo de la conmemoración de Día Internacional de la Mujer, tuvimos una charla con Olivia Hernández, Directora de Sistemas de Apoyo Económico, en esta entrevista nos compartió sus experiencias como mujer, mamá y profesional de la Tecnología de Información.

¿Olivia, como empezaste tu desarrollo profesional?

Tuve la ventaja de estudiar la carrera de Informática, que a diferencia de las carreras de Ingeniería, había igualdad de hombres y mujeres; durante esos años de universidad desarrollé algunos sistemas así que cuando obtuve mi primer empleo, ya tenía experiencia en la creación de software. 

En mi primer trabajo me contrataron para colaborar en un área de desarrollo de software en la que había alrededor de 20 programadores de los cuales 1 era mujer, contrariamente a lo que cualquiera pensaría, fui muy bien arropada por mis compañeros de trabajo. El problema fue que mi compañera, quien tenía acaparada la atención, tuvo que compartirla conmigo y esto provocó algunas diferencias en la convivencia diaria. 

A finales de los 80s, buscamos reforzar la presencia femenina con más desarrolladoras, en esa época no había muchas mujeres en las áreas de informática y sistemas por lo que nos costó mucho trabajo conseguir equilibrar la presencia de hombres y mujeres. También en esos años seguía esa regla no escrita de que cuando una mujer se casaba dejaba de trabajar para dedicarse a la familia y el trabajo en desarrollo de software era y sigue siendo muy demandante. 

“Como mujeres profesionales en cualquier disciplina o aspecto de la vida, tenemos que decidir en base a lo que esperas, lo que deseas y lo que estas dispuesta a sacrificar.”

¿Cuál ha sido tu relación con los jefes?

El jefe es como tu papá, a veces me encontré con jefes que eran de muy fácil trato y otras con jefes “rudos”, que no es que no te quisieran pero su forma de ser era fuerte…. Uno de estos jefes “rudos” llego a ser mi socio y desarrollamos muchos proyectos durante varios años. 

En una ocasión después de trabajar en distintos proyectos exitosos ocupando el puesto de analista de sistemas le pregunte a mi jefe: ¿Por qué no podía ser líder de proyectos? Su respuesta fue: “Dime ¿por qué quieres ser líder?”, di mis razones y después de eso tuve que trabajar aún más en “trabajo en equipo” y finalmente conseguí el liderazgo de proyectos.

¿Cómo te fue en la parte familiar – profesional?

No fue nada fácil compaginar estos dos aspectos ya que ambos son fundamentales en tu desarrollo como ser humano, hubo momentos en que recibí reclamos como “Cuando entras a tu oficina se te olvida la familia…”

Tengo cuatro hijos y recientemente me he convertido en abuela, por lo que tuve que darles una formación para hacerlos personas independientes. Esta labor es muy difícil y me exigía un esfuerzo adicional ya que en el plano profesional me gusta dar el 100%, sin embargo existen muchas opciones para lograr con éxito el desarrollo de los hijos: escuelas, guarderías y en algunos (muchos) casos la familia que te apoya, pero aún con estos apoyos a la mayoría de las mujeres nos sigue costando mucho trabajo desarrollarnos profesionalmente.

¿Cómo compaginaste el trabajo y la maternidad?

Antes existía un gran riesgo de ser dada de baja por embarazo, si no lo hacían antes del nacimiento, las empresas te daban la gran sorpresa regresando al trabajo. El primer día regresando de mi primer embarazo, me mandó a llamar el Gerente de Recursos Humanos, me dijo: “Durante tu ausencia hablé con tu jefe para darte de baja y contratar un sustituto para cuando regresaras del embarazo, pero su respuesta fue ¿por qué me quieres dejar sin mi mejor elemento?” 

La empresa consideraba darme de ba
ja, sin embargo mi jefe peleó por conservarme en su equipo básicamente por mis resultados y lo más sorprendente fue que en ese momento no solo conservé mi empleo sino que además recursos humanos me dijo: “Como tus necesidades económicas van a cambiar te vamos a dar aumento de sueldo”. En ese aspecto me siento afortunada, mi jefe pesó más que la política no escrita de despido por maternidad, pero esto fue en base a que el trabajo y el compromiso de mi parte habían sido tomados en cuenta; en esa empresa colaboré más de 6 años. 

Mi experiencia anterior a ese trabajo incluía estudios de contabilidad, haber trabajado como agente profesional de seguros, así como mis estudios profesionales en informática y la experiencia que ya tenía desarrollando software, esta combinación dio como resultado muchos beneficios para la empresa. 
¿Hay diferencia de oportunidades por ser mujer? 

Dar lo mejor, prepararse, esforzarse y trabajar son la base para tener las mismas oportunidades laborales y de vida, incluso mejores.

De mi segundo embarazo, tuve una hija maravillosa, por alguna razón me costó mucho trabajo dejarla y decidí salirme de la empresa donde laboraba. Estaba acostumbrada a un ritmo de vida acelerado, así que busqué opciones para trabajar y tuve la oportunidad de laborar en el ámbito Académico.

Empezó siendo un trabajo de tiempo parcial y aprovechaba para estudiar una maestría, en el lapso de un año ya había alcanzado una serie de responsabilidades iguales a la de mi anterior empleo. 

Después de 3 años me independicé y fu
ndé una empresa de desarrollo de software, mi primer proyecto fue un sistema para iglesias. Durante esta experiencia el mayor problema fue el cobro de los servicios profesionales, el mercado mexicano en esa época como ahora le cuesta valorar el conocimiento y la experiencia de un profesional preparado.

¿Qué contratiempos has encontrado en tu desarrollo profesional?

Mi naturaleza me obliga a decir las cosas de forma directa y señalar en el plano profesional cuando hay un problema o si algo no funciona bien. Eso me ha costado en ocasiones el ser excluida, pero finalmente me pagan, para identificar los problemas, resolverlos y decir la verdad. 

¿Hay oportunidades en el desarrollo para la mujer? 

Las oportunidades no son un asunto de género, las oportunidades nos las damos nosotros. Si yo me esfuerzo en prepararme y trabajar al 110% es más viable poder alcanzar los objetivos.

Desde mi punto de vista “El Éxito” no es ganar mucho dinero, éxito es hacer lo que te gusta hacer. Para esto debemos saber qué es lo que queremos. En la academia les enseñaba a mis alumnos sobre “necesidades”, no importa que tengas la mejor computadora y las herramientas de vanguardia., si no sabes cómo resolver “las necesidades” de nada sirven estas herramientas. Hay que aprender a analizar cada situación para encontrar la solución óptima. 

Teniendo nuestro objetivo claro podemos ponernos grandes metas y trabajar para alcanzarlas así como estar preparados para cuando hay cambios o cuando se presenta un momento crítico. En esas situaciones debemos tener la cabeza fría para analizarlas y verlas como una oportunidad. Esto solo se presenta si hacemos lo que realmente nos gusta. 

¿Te consideras una mujer exitosa?

Me considero una mujer exitosa que hace lo que le gusta y he dado mi máximo esfuerzo en cada proyecto, empresa y con mi familia. Creo que he alcanzado la plenitud que una mujer busca en el plano personal y profesional.

Opensys agradece a Olivia Hernández por su tiempo para compartir sus experiencias personales y profesionales como parte de nuestra conmemoración del Día Internacional de la Mujer.


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